sábado, 3 de julio de 2010

El Día que el Castrismo Perdió dos Veces en el Mundial de Sudáfrica


Hoy el castrismo perdió por partida doble en el mundial de Sudáfrica. Primero, cuando no hubo guerra nuclear antes de los cuartos de final, tal y como profetizó el brujo mayor hace unos días, con ese afán apocalíptico que lo domina desde que tuvo largos orgasmos a principios de los años 60, cuando cada noche soñaba con volar la Casa Blanca con Kennedy dentro, y ser él mismo quien apretara el botón que borrara del mapa a todos los cubanos.

La segunda derrota le llegó con la magistral goleada que Alemania le propinó a Argentina por cuatro goles a cero. Durante toda mi vida he simpatizado con el futbol argentino y sus extraordinarios jugadores. Todavía recuerdo los goles de Mario Alberto Kempes, y los de Maradona. Hoy día mi jugador favorito es Leo Messi, a pesar de que soy hincha del Real Madrid. Pero desde que Maradona es el director técnico de Argentina, no me sastiface el futbol de la selección suramericana. Y es que no puedo simpatizar con un equipo que dirige un furibundo defensor del castrismo, que lleva tatuado en su cuerpo la imagen de un asesino de cubanos: Ernesto "Che" Guevara, que se refugió en Cuba a consumir cocaína, como muestra la foto.
Maradona no tiene, como entrenador, el talento que le sobraba como jugador. Su clasificación hasta cuartos de final fue sólo un espejismo, en el que mucho ayudó la calidad de sus jugadores y el pésimo arbitraje ante México. Argentina, cuando enfrentó a un rival de nivel, mostró todas sus carencias, o quizás su única carencia: es un equipo que juega sin idea, sin un verdadero sistema. Hoy, con Messi anulado, se evidenció. Y es que, como en las eliminatorias, cuando Messi desaparece, desaparece Argentina.
Al que hay que cuestionar es al presidente del futbol argentino, que le dio el mando a un patán ignorante, prepotente y con ínfulas de totalitario.
Argentina está merecidamente fuera del mundial, y el castrismo resultó aplastado bajo la lápida del sentido común y la goleada alemana.

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