Pablo Milanes:«No estoy de acuerdo con la actitud de Castro hacia los contestatarios»

Milanés reclama los cambios anunciados por Raúl «que el pueblo espera y se pregunta en medio de una parálisis agónica cuándo llegarán»

Autor: Mercedes Lodeiro/La Voz de galicia

El cantautor cubano Pablo Milanés, de gira estos días por varias ciudades españolas, no solo no se sustrae a lo que sucede en su Cuba natal con los presos políticos y las Damas de Blanco, sino que es motivo de polémica por declaraciones en las que reivindica cambios en la isla. Sus palabras han llegado a oídos del disidente en huelga de hambre Guillermo Fariñas, hospitalizado en la ciudad de Santa Clara tras sufrir un segundo colapso en su salud la semana pasada.

-Fariñas ha dicho que teme por su integridad física desde que afirmó que «las ideas se discuten, no se encarcelan ni se matan», ¿qué cree que le puede pasar después de condenar la actitud no humana de Raúl Castro?

-Hace muchos años que vengo criticando abiertamente lo que a mi juicio se hace mal en mi país y nunca he sentido una represalia contra mi persona y mucho menos contra mi familia, por lo que estoy seguro de volver a Cuba teniendo la misma disposición de criticar lo mal hecho y celebrar lo bien hecho. Realmente, se dan casos en Cuba de que personas anónimas tengan mi actitud y no salgan bien paradas ante las autoridades, medias, intermedias y hasta superiores, quién sabe; esto lo he denunciado en diversas entrevistas y esa es una de las razones por las que lucho en mi país.

-¿Qué le diría a Fariñas?

-No he personalizado mi crítica, sino que en general he criticado una actitud del Gobierno hacia los contestatarios con la que no estoy de acuerdo. Yo creo que con mi negación a suscribir la carta que justificaba el encarcelamiento de 75 intelectuales y tres fusilados por el intento de secuestro de una lancha, convocada por el Estado cubano en el año 2003, quedó clara mi posición; pero los medios desconocen en general estos hechos, así como mi trayectoria a la hora de considerar los acciones que estimo cuestionables.

-¿Suscribiría el manifiesto de artistas hispanos para pedir la liberación de los presos políticos?

-Yo estoy suscribiendo mi propio manifiesto. Con mis palabras digo más y no tengo que firmar nada hecho por otros.

-Usted es partidario de cambios en Cuba, ¿cuáles?

-Los cambios, entre muchos otros, son esencialmente los que ha venido planteando Raúl Castro y que no se han cumplido. El pueblo espera y se pregunta en medio de una parálisis agónica cuándo llegarán.

-Además de defender los derechos humanos, ¿apoya la libertad de expresión?

-Yo no soy un defensor de los derechos humanos solamente, ni de la libre expresión, ni del derecho a huelga, ni del restablecimiento de sindicatos -representados por los obreros, y no por el Estado-, ni de la instalación del pequeño comercio, ni la libre salida del cubano de su país, etc., etc., sino que soy un luchador por la perfección del socialismo que hemos proclamado durante 50 años, donde todas estas premisas no chocan con la bondad del sistema, y sin embargo no se dan, no existen, en medio de una absurda contradicción entre filosofía y hechos.

-¿Se considera un privilegiado por poder expresarse mientras otros temen ser represaliados o lo son?

-En absoluto me considero un privilegiado, porque detrás de cada palabra mía solamente estoy yo, que asumo con responsabilidad lo que he sido y lo que soy con entereza y sin ningún temor.

-¿A qué se refiere cuando dice que los revolucionarios de la revolución se han convertido en reaccionarios de sus propias ideas?

-En el planteamiento está la respuesta a su pregunta, porque me imagino que la gente, y usted también, deben saber lo que es acción y reacción.

-¿Hacia dónde debe avanzar el socialismo cubano?

-Si no lo desviamos, ya le he explicado a dónde yo considero que debe ir.